miércoles, diciembre 19, 2007

La alegría de un nacimiento.

Por: Jesús Humberto González de León.

Mi esposa y yo nos enteramos que vamos a ser papás por primera vez. A nuestra familia nos parece increíble, nos llena de ilusiones, fe y esperanza, de la misma forma que la Navidad llena a toda la humanidad. Digo de fe, porque desde el momento de la concepción sabemos que hay un nuevo ser en gestación, aunque no lo veamos.
Sucede lo mismo con la fe cristiana “nos da algo de la realidad esperada, y esta realidad presente constituye una prueba de lo que aun no se ve… el hecho de que este futuro exista cambia el presente, el presente esta marcado por la realidad futura, y así las realidades futuras repercuten en las presentes y las presentes en las futuras.”
Fe, también en que Dios nos concederá ese milagro y bendición que se llama engendrar una vida humana. Para su procreación uno coopera, con mucho gusto por cierto, pero uno solo es instrumento del poder de Dios para dar vida. Hace poco leí que unos científicos afirmaban poder crear vida artificial. Seguí leyendo y me di cuenta que era vida a partir de vida existente. Me acorde de la anécdota, en que un científico retaba a Dios diciéndole que el también podía crear vida a partir del barro, y Dios le dijo: Sí pero consigue tu propio barro. Así son algunos científicos de altaneros, pero aquellos que pongan su fe y esperanza en la ciencia, la política y en el progreso recibirán a cambio unaaaa ¡Bomba atómica! “No es la ciencia la que redime al hombre. El hombre es redimido por el amor.”
Comentaba que este futuro bebe también nos llena de esperanza porque la vida nueva que se esta gestando da un nuevo sentido a la existencia de nuestra familia. Cuentan que un feto le preguntó a su hermano gemelo: ¿Tú crees en que haya vida después del útero? El caso es que para que un bebe nazca bebe debe “morir” a su vida cómoda dentro del útero. La alegría de la navidad nos renueva la esperanza de que Cristo, con su muerte, nos abra “la puerta oscura del futuro”, para que después de morir podamos acceder a la vida eterna. Ese es el verdadero sentido de la navidad y no el materialismo, error heredado de “Marx, quien creyó que una vez solucionada la economía, todo quedaría solucionado, el hombre no es posible curarlo solo desde fuera. De nada sirve tener las mejores estructuras sin la libre convicción de adherirse a ellas.” Tampoco es Navidad el olor a pino con musgo, a ponche, a calentador de gas, a tamales o a pavo. Ni la las luces, ni los monitos del nacimiento y la estrella, ni el regalo que si no das “eres el grinch, dice santaclos”. Ni la pastorela donde sale el diablo borracho que se hace pendejo al pastor quitándole su aguinaldo. Navidad si es cuando sientes que hay un vacío, a pesar de tanta abundancia, y te acuerdas de que Jesús no fue un revolucionario, sino el hijo de Dios, quien quiso nacer y hacerse pobre y sufrir como tú y por ti. Si lo dejas nacer en tu corazón, eso sí es festejar Navidad. jesus50@hotmail.com
Dedicado con agradecimiento a Benedicto XVI, por su inspiración y por iluminarnos acerca de que la razón y la fe caminan siempre juntas. Las frases entrecomilladas las escribió en noviembre, en su encíclica “Spe Salvi.”

Callaron a Chávez, otra vez.

Por: Jesús Humberto González de León.

En una entrevista en Venezuela a Sofía Valera, habitante de Petare, un barrio dos veces pobre por ser bastión de Chávez, dijo: Somos Chavistas pero no vamos a votar por el “sí”. - ¿Por qué? -Le pregunta el reportero. -Porque... no le digo, porque tengo miedo, tenemos miedo, no entendemos eso, eso que dice (Chávez). No se puede engañar a todo mundo, ni tratar a los pobres como si fueran ignorantes, tienen dignidad aunque se les quiera comprar con dadivas. Personas como Sofía se dan cuenta cuando les condicionan su libertad y sus gobernantes actúan movidos por intereses de grupo y no por el bien común. Contrasta otra entrevista hecha en el mismo Petare a Yamina Esculona: “En esta reforma se nos toma en cuenta a nosotros el pueblo y no a la gente de la alta sociedad…se nos apoya muchísimo… nos da beneficios a nosotros..” No encuentro un ejemplo mas claro de cómo la izquierda logra engañar a algunos como Yamina, promoviendo una lucha de clases con violencia, de ricos contra pobres. La izquierda coarta la libertad, amenaza con represalias, opresión y perder privilegios de empleo o dadivas, a quien se atreva a la disidencia de opinar en desacuerdo. La paranoia llega al grado de que no se permite ser visto con alguien de la oposición, ya que se considera traición. Lo que ocurren en Venezuela no esta tan alejado de nuestra realidad. Aquellos gobernantes o partidos que por su ambición siembran la cizaña del odio y la violencia entre los mexicanos que no piensan como ellos, caerán victimas de su propia trampa y cosecharan tempestades.
José Saramago, premio Nóbel 98, narra en su novela política: “Ensayo sobre la lucidez” como en una ciudad el 83% de los ciudadanos vota en blanco. De manera similar y paradójica, lo que más le ayudó a la democracia en Venezuela fue que un 40% no votó, en un acto de desacuerdo temeroso. Cuando despertó el pueblo de Venezuela el gorila dictador, caricatura de Fidel, todavía estaba ahí y le aplicaron un “¿Por qué no te callas?” a su reelección indefinida, a su socialismo, a su propiedad comunal y a la expropiación. Chávez seguro estará molesto con todos aquellos que le fallaron en sus cálculos de manipulación demagógica. Giovanni Sartori nos ha advertido del peligro del referéndum: “A mi parecer en México la figura del referéndum, es bastante provocativa y riesgosa, y puede terminar siendo la mejor arma de un presidente populista no sujeto a controles, ya que, en general, la Constitución sigue siendo la misma con la que gobernó un sistema de partido hegemónico en sus mejores momentos, con abusos y excesos.” Además el truco esta en el tema que se pone en la agenda y que no se respeta a la opinión de una minoría. Imagínese a Obrador preguntando en el Zócalo a Su asamblea: ¿Quieren que me reelija?.” –Todos: “Síííí.” La democracia en México es muy incipiente, no hay equilibrio real de poderes en muchos estados, ni autonomía de instituciones. En Venezuela estuvieron a punto de caer en esta trampa. ¿Como llegaron los venezolanos hasta ese punto? Dejándose manipular, por una sumisión modorra y apática que aqueja a muchos. Todavía podemos hacer mucho para mejorar la democracia. jesus50@hotmail.com

Iglesia y política.

Los perredistas irrumpieron en la catedral del D.F. para quejarse del ruido y acallar las campanas. A López Obrador le hace falta el “¿Porque no te callashh?” que le aplicó el rey de España a Chávez. A la Iglesia, con sus aciertos y errores, la han atacado siempre y a pesar de ello ha sobrevivido siglos. El Obispo Vera ha sido víctima de espionaje, de una denuncia y algunos comunicadores esbirros lo han agredido haciendo burla de el y de la Iglesia, acusándolo de participar en política. Se escandalizan de manera hipócrita ante nimiedades mientras dejan pasar lo relevante. Pero ¿Hasta donde debe llegar la presencia de la Iglesia en la vida pública? “Las estructuras justas nacen de un consenso moral de la sociedad sobre los valores fundamentales y sobre la necesidad de vivir esos valores renunciando incluso al interés personal. Este trabajo político no es competencia inmediata de la Iglesia. El respeto de una sana laicidad-incluso con la pluralidad de las posiciones políticas- es esencial en la tradición cristiana. Si la Iglesia comenzara a transformarse directamente en sujeto político, no haría más por los pobres y por la justicia, sino que haría menos, porque perdería su independencia y su autoridad moral, identificándose con una única vía política y con posiciones parciales opinables. La Iglesia es abogada de la justicia, de la verdad y de los pobres precisamente al no identificarse con los políticos ni con los intereses de partido. Solo siendo independiente puede enseñar los grandes criterios y los valores inderogables, orientar las conciencias y ofrecer una opción de vida que va más allá del ámbito político. Educar en las virtudes individuales y políticas, es la vocación fundamental de la Iglesia en este sector.” Sin embargo “Exagerar el laicismo con el pretexto de la democracia anima a que fuertes poderes pretendan rechazar toda presencia y contribución de la Iglesia en la vida pública, y la presionan para que se repliegue en los templos. Consciente de la distinción entre comunidad política y comunidad religiosa, base de sana laicidad, la Iglesia no dejará de preocuparse por el bien común de los pueblos y, en especial por al defensa de principios éticos no negociables porque están arraigados en la naturaleza humana.” Negar derechos a la Iglesia es reprimir la libertad de credo y expresión. Algunos políticos, mareados de poder, les molesta que se les abra los ojos a la gente y les señalen sus fallas. Marco Almazán dijó: “La política es el arte de impedir que la gente se meta en lo que sí le importa.” No solo a la Iglesia se le pretende negar su contribución, también a sus miembros. La política no es monopolio del gobierno. La corrupción en los gobiernos ocasiona miseria, una democracia irreal, sin separación de poderes ni justicia. La sociedad civil desencantada se autoexcluye de su responsabilidad de participar en la vida pública. Se necesita de políticos honestos que hagan iniciativas inspiradas en doctrina social. Nos sentimos predestinados a ser simples espectadores y abdicamos de formar la realidad promoviendo los derechos humanos. La realidad no se puede explicar solo desde un ámbito político, ni económico, científico o de entretenimiento, que son sus fragmentos. El sentido que da unidad a todo lo que existe es el religioso, su falta produce un vacío. jesus50@hotmail.com